miércoles, 9 de abril de 2008

Centros MEC











Cebollatí
Se quiere fortalecer el Uruguay Inteligente
El Director Nacional de Educación, planteó su propuesta canalizada por los Centros MEC, uno de los cuales comenzará a funcionar en mayo en la villa.

El pasado sábado 5 de abril se hizo presente en Cebollatí en una reunión convocada en la Junta Local, el Director Mardones, junto a Machín, asesor y coordinador nacional de los centros MEC y el programa Cosas de Pueblo y el Director Departamental de Cultura de Rocha, Fernando Rótulo. Allí estuvieron presentes Presidente y Secretaria de la Junta al igual que Ediles locales y representantes de la Escuela y Liceo de la villa al igual que de la Escuela de CALPACE. Totalizando 18 personas reunidas en la sala de sesiones de la Junta.

Los invitados tomaron conocimiento de cual será la acción de estos centros que se vienen instalando en todo el país y en particular la importancia para las localidades mas alejadas de los grandes centros poblados. El Centro MEC en Cebollatí se instalará en las instalaciones del Liceo Viejo ubicado en las calles Sobrero y San Miguel, local que viene siendo refaccionado y es el primero que se instala de esta manera, ya que en el resto del país se utilizaron edificaciones en uso.

También de parte de las autoridades se escucharon algunos planteamientos de orden cultural de parte de los representantes locales, marcando que con este Centro, el mismo tomaría un verdadero movimiento de Casa de la Cultura local.

El Profesor Mardones se refería a este servicio a instalarse en breve.
“Rocha es el primer lugar por donde instalaremos un Centro MEC este año y Cebollatí el primero de Rocha. Luego de culminadas las obras, la intención es abrir a principios de mayo. habrán cinco en el departamento de Rocha. Los centros MEC son casas de la cultura con objetivos dirigidos a toda la comuna es una propuesta abierta para que cada comunidad la construya de acuerdo a su necesidad y aspiraciones. Va a contar con equipamiento informático de ultima generación., con cinco computadoras, una televisor plasma de gran volumen, DVD y toda una tecnología puesta al servicio de las necesidades culturales.
Hay dos coordinadores departamentales que estarán a cargo de la supervisión y coordinación de las tareas de los cinco centros MEC.

El programa se canaliza hacia una alfabetización digital a toda la población. Se piensa que en un plazo de 10 años, todos pueden no solo tener acceso al servicio informático que cada vez es mas importante en la vida cotidiana. Esta es una meta que la planteamos en Uruguay que tiene una base que puede ser cumplida en el lapso pensado, donde queremos que en ese tiempo no haya ni un uruguayo que no pueda estar familiarizado con el uso de la informática.

Este programa es un brazo del Plan Ceibal, donde con una propuesta mas democratizadora y mas fuerte pretende cumplir con esos lineamientos y directivas y tiene una enorme potencialidad revolucionaria. Uruguay es el primer país del mundo que aspira a que cada niño maneje una computadora y sobre todo porque no va a quedar en la escuela, si no que se la va a poder llevar a la casa y allí, podrá enseñarle y compartir con los mayores teniendo una influencia directa sobre el entorno. Es una apuesta al futuro, ahora mas que nunca cuando se habla de la sociedad de la información y el conocimiento. Incluso si hablamos del Uruguay productivo cuando hablamos en departamentos como este, arrocero y turístico, la inteligencia puesta a trabajar para con el producto tiene una importancia fundamental.


El Uruguay natural, el Uruguay productivo, el Uruguay cultural todos son necesarios, pero se unen en un concepto, el Uruguay inteligente”.

Como datos accesorios, podemos dar cuenta que Cebollatí, cuenta en la actualidad con una población aproximada a las 2.200 personas, tomando en cuenta el casco urbano y caseríos arroceros de influencia.
La matrícula escolar asciende este año a los 250 alumnos en tanto que el Liceo tiene una matrícula de 163 estudiantes. Existen dos locales que funcionan como ciber, pero a los cuales hay poca concurrencia de personas mayores, una de las fortalezas a las que apuntan este sistema, los adultos que todavía se mantienen alejados de la tecnología y el mundo apunta al manejo de las computadoras.
También podemos anotar del importante trabajo presentado por la vecina Maestra Nadina Fernéndez, con su proyecto cultural de aprovechamiento global del local del Liceo Viejo que ha quedado a estudio de factibilidad, económica, aunque no se descarten nuevos locales para ser centro cultural de Cebollatí.


Cosas de pueblo
La otra “pata” de las propuestas de este programa educativo es el denominado Cosas del Pueblo. El profesor Mardones también se refirió al mismo, manifestando que: “Es una propuesta que apuesta a fortalecer la cultura desde un punto de vista mas antropológico. Va en búsqueda de las identidades locales, capítulo fundamental de la cultura. Un fortalecimiento de nuestra identidad como nación y nuestra nación es una suma de nuestras identidades locales. Tener registros visuales, escritos, de la cultura local. Hay un viejo slogan de la UNESCO, cada anciano que muere es una biblioteca que se pierde. Hay mucha sabiduría encerrada en cada ser humano para que no se pierde. Intuitivamente hemos encontrado en cada pueblo cosas y registros de vecinos que han hecho su archivo y pasa por que se les ocurrió, sin que ningún gobierno los respalde. Bueno nosotros queremos darle el marco institucional a ese trabajo, esas Cosas de Pueblo”.


Taiperos

Estuvo sobre la mesa la conversación sobre el término que identifica a los cebolleros en el concierto regional y se puso a consideración trabajar sobre el término como identidad local.
El Tripero, oficio de gran arraigo y sacrificio, tiene su reconocimiento, desde el tema que popularizó Alfredo Zitarrosa y que nombra las arroceras de la sexta sección en letra de poeta rochense José María Roldán.
También desde la época que la selección juvenil del pueblo participara con éxito en torneos esteños, se la conocía como la “selección taipera”.
Hoy también un comercio local, lleva el nombre de El Taipero, en honor y reconocimiento de este importante oficio.















A orillas del Cebollatí - Walter Acarino Ipuche

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